El jamón ibérico es un producto muy especial, para poder disfrutarlo al máximo hay que saber muy bien cómo se debe consumir, y también cómo se debe de conservar. A continuación te explicamos brevemente esto, y te invitamos a que sigas visitando nuestro blog para que conozcas a profundidad todos estos detalles.
Sobre su consumo
El jamón ibérico se debe de consumir a una temperatura ambiente, lo cual se considera cercano a los 20º C. Al tener el jamón a esta temperatura el color de éste se vuelve brillante debido a la grasa natural del mismo. Si se mantiene a una temperatura más fría tiende a verse opaco.
Para disfrutarlo al máximo es esencial que el jamón posea un buen corte, este puede variar ligeramente entre gustos, pero por lo general se buscan lonchas finas que posean algo de grasa para que sean jugosas.
Conservación del jamón
Lo bueno de este producto es que su conservación es realmente sencilla. Con sólo mantenerlo en un lugar seco y fresco, con una temperatura que ronde entre los 10 y los 5º C se puede preservar muy bien. Es recomendable mantenerlo colgado o respectivamente en un jamonero.
Cuando el jamón se ha cortado, éste deberá ser consumido en el momento. Si se desean guardar los cortes es importante cubrirlo con papel para envolver alimentos o film transparente, lo importante es evitar su contacto con el aire ya que si no se reseca.
Lo más importante en todo caso es sólo cortarlo si se va a consumir.